Un ciclista fue sancionado anoche, por circular bebido en Chipiona, con una multa de 1.000 euros (por sobrepasar el límite de 0,50 miligramos de alcohol por litro de aire espirado), según informa la Policía Local de la localidad en su Facebook.
Las sanciones a ciclistas se rigen por el Reglamento General de Circulación y son las mismas que las que reciben los conductores de vehículos a motor. Con unas diferencias: siempre se trata de sanciones administrativas y no se consideran delito. Y como para circular en bicicleta no hace falta ningún tipo de permiso, la sanción por conducir bebido no implica la pérdida de puntos del carné de conducir.
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«En patinete, en bici, en ciclomotor… Si bebes alcohol y conduces, tarde o temprano, perderás. Si no que se lo digan al sujeto de la noche que había bebido ‘un poquito’, y su tasa le llevó al top ten de las denuncias por alcoholemia», ironiza en su Facebook la Policía Local de Chipiona.
La negativa a someterse a la prueba de alcoholemia también está castigada con una multa de 1.000 euros.